Día 3

Pasan los días y las cosas empeoran. No tengo ganas de nada, lloro al levantarme y al dormir. Hago cosas y los recuerdos vienen a mi mente. Ideas incorrectas me acechan, me llenan de falsas esperanzas.

"Ya no te amo", debería apuntarlo en todos lados. Ponerlo en la carcasa de mi celular y de fondo de pantalla. No para martirizarme, sino para soltar. 

Hoy hablaré de todo lo malo que, después de estar cegado, recién me he dado cuenta. Pero, aunque no lo merezcas, seré como siempre he sido en mi vida: empático. 

Día 3

"¿Es normal que, cuando estemos con la gente, tu pareja no quiera besarte, abrazarte o hacerte una caricia?", me dijo mi papá. No supe que responder, evidentemente no es normal. Pero claro, siempre intenté contentarte por encima de lo que yo sentía, por eso aceptaba eso.

"No, no es normal. Alguien que te ama de verdad no tiene miedo de expresarte sus sentimientos delante de cualquier circulo social. Ahí había una mala señal", me dijo mi padre. Él es una persona que, hasta en mis peores momentos, quiere motivarme siendo duro con mis sentimientos. Entiendo su punto, pero estoy muy afectado como para que me digan "ya no llores" y pensar que con eso se me va a pasar.

A ti te daba vergüenza que yo sea expresivo contigo en público, ya que siempre te dio miedo el que dirán. Siempre me decías que no o te ponías muy incomoda: "no seas tan espeso". Sí, soy intenso. Me gusta ser afectuoso en todo momento con la persona que amo, pero no valoraste eso. Siempre "el que dirán". Ni siquiera quería hacerte nada fuera de lo común: un pico, una abrazo, una caricia, ¿está mal?

Cuando te fui a ver, uno de los chicos con los que trabajas, que seguro ahora tiene vía libre para salir contigo, te dijo para ir a almorzar. Tu respuesta fue: "No puedo, ha venido un FAMILIAR". Lo gracioso no fue eso, lo increíble era que yo aceptaba eso: "No te preocupes, yo entiendo que no quieras que se enteren de que existo, te malograría lo planes". 

"Es que cuando saben que tengo novio, se alejan de mi", respondiste. YO ACEPTABA ESO. ¡DIOS! 

Yo me amó más que nada, pero mira cuan baja tengo mi autoestima que permitía este tipo cosas. Ya no es un cosa de machismo, feminismo, cosas personales de cada uno, es que NO ME DABAS MI LUGAR. 

Claro, como le dije anteriormente, ahora, o desde hace un tiempo, quieres vivir cosas que no has vivido. ¡Está genial! ¡Disfruta! ¡Conoce! ¡Goza! ¡Experimenta! Te deseo lo mejor en ese aspecto. 

Pero tú y yo sabemos, por todo lo que nos conocemos, que hay cosas en tu vida que no has resuelto. Tú has superado muchas cosas malas dejándolas pasar y así no es. Si en verdad quieres "estar sola" como dijiste, aprovecha y mira tu salud mental. 

Trátate, suelta y mejora esas cosas que en confianza me dijiste. Busca un psicólogo, te va a servir para tu vida. No lo quisiste hacer conmigo ni por mi, hazlo POR TI. Es el mejor consejo que te puedo dar. 

Y también para que des cuenta como me has tratado, el daño que me has provocado ahora, pero también todo el que he pasado desde hace mucho tiempo. 

¿CÓMO PUDISTE TRATAR ASÍ A LA PERSONA QUE TE AMABA? ¿Te parece justo todo el dolor que me has causado? ¿Te parece bien que desde hace meses me hayas dado 1% de amor mientras yo te daba 200%? ¿Tan fría eres que cuando era cariñoso, ponías tu cara de "a qué hora me sueltas"?

Ya lo sé, ya lo sé. Estuviste conmigo por compromiso, respeto o el cariño de los años desde hace un tiempo, pero debiste ser sincera. Pensarás: "Te ibas a poner mal". ¿Y cómo crees que estoy ahora? ESTOY EN EL PEOR MOMENTO DE MI VIDA. Probablemente hoy estaría mejor, ya habría superado ciertas etapas. 

Me dejaste en pleno momento crítico del año: la chamba se pondrá más pesada por las copas internacionales y en la maestría estoy en plenos parciales. ¿No crees que debiste decirme todo esto antes de irte a Celendin?

Fácil aún sentías cosas por mi. ¿Quién no quiere tener a alguien ahí que lo da todo y sigue y sigue sin dar lo mismo? ¿A quien no le gusta que le rueguen? 

Sabes lo que creo, que has estado mal asesorada. No sé de quien, pero te han aconsejado mal. Antes que te vayas todo iba mejor y lo sabes. Pero yo sé que siempre, factores externos, te rondaban la cabeza de ideas que iban en contra de nosotros. De mi. Hoy seguro no lo ves así, pero espero que llegue el día que te arrepientas y veas que hubo un patita que dio hasta lo que no tenía para que seas feliz.